Uso de leísmo, loismo y laismo
Una de las alteraciones más palpables que se producen con los vulgarismos del español se relacionan con el uso de los pronombres "Le", "La" y "Lo".

Una de las alteraciones más palpables que se producen con los vulgarismos del español se relacionan con el uso de los pronombres 'Le', 'La' y 'Lo'.
Leísmo:
El leísmo es el fenómeno gramatical que se produce cuando se utilizan los pronombres personales átonos de complemento indirecto (le y les) en función de complemento directo donde deberían haberse escrito los pronombres personales átonos de complemento directo (la, las, lo o los, según la oración).
Incorrecto:
A María le pillaron copiando en el examen
Correcto:
A María la pillaron copiando en el examen-
Los leísmos pueden ser, por orden de mayor a menor frecuencia:
- De persona (singular y masculino);
- De cosa (singular y masculino);
- De persona (plural y masculino);
- Femenino (ya sea de persona o de cosa, plural o singular).
Laísmo:
Es un fenómeno gramatical que se produce cuando se utilizan los pronombres personales átonos de complemento directo del femenino (la y las) en función del complemento directo, en donde deben haberse escrito los pronombres personales átonos de complemento indirecto (le o les).
Incorrecto:
La dijo que fuera a recoger el paquete a la oficina de correos. (Laísmo)
Correcto:
Le dijo que fuera a recoger el paquete a la oficina de correos. (Uso normativo)
La vio yendo a recoger el paquete a la oficina de correos. (Uso normativo)
Loísmo:
Es el fenómeno gramatical que se producen cuando se utilizan los pronombres personales átonos de complemento directo del masculino (lo y los) en función de complemento indirecto, donde deberían haberse escrito los pronombres personales átonos de complemento Indirecto (le o les):
Incorrecto:
A Alberto no lo gustó el plan de viaje
A Pedro lo salió una manzana picada
Correcto:
A Alberto no le gustó el plan de viaje
A Pedro le salió una manzana picada