13 muertos por las violentas inundaciones en la Costa Azul francesa

Al menos 13 personas perecieron por las inundaciones provocadas por las violentas tormentas en la noche del sábado en la Costa Azul, en el sureste de Francia, donde cientos de pasajeros de trenes quedaron bloqueados y numerosas calles y carreteras quedaron anegadas.

Un intenso aguacero que alimentó la crecida del pequeño río costero de la Brague sumergió las calles de Cannes, Antibes, Mandelieu-la-Napoule, Villeneuve-Loubet y Niza, precisó François-Xavier Lauch, alto cargo de la prefectura departamental de los Alpes Marítimos.

Tres personas de avanzada edad murieron ahogadas en un centro de ancianos de Biot, cerca de Antibes. "Se encontraban en la planta baja y las cubrió una ola de agua", indicó Lauch.

En Cannes, una mujer de unos 60 años fue hallada sin vida cerca de un aparcamiento. Otras tres víctimas fueron descubiertas dentro de su coche en Vallauris-Golfe-Juan. El vehículo fue arrastrado por las aguas al entrar en un pequeño túnel.

Una nueva víctima, empalada en un camping de Antibes, fue descubierta en la mañana de este domingo, mientras se buscaban los cuerpos de cinco personas en los aparcamientos de dos inmuebles de Mandelieu-la-Napoule, donde los socorristas bombeaban el agua, precisó la prefectura.

Las trombas de agua inundaron asimismo campings emplazados cerca de Antibes. Dos helicópteros de los bomberos trabajaban a destajo para trasladar a lugar seguro a los campistas. Algunos de ellos buscaron refugio encima de sus caravanas.

Los socorristas tenían dificultades para acceder a las zonas siniestradas y era de temer que el balance de víctimas se pudiera agravar. En las localidades damnificadas se abrieron estructuras de acogida de emergencia y se esperaban refuerzos de otros departamentos franceses.

El presidente, François Hollande, expresó "la solidaridad de la Nación" y el primer ministro, Manuel Valls, de visita en Japón, subrayó su "profunda emoción" y su "apoyo a las familias de luto".

"Varios vehículos fueron arrastrados hasta el mar", contó el alcalde de Cannes, David Lisnard. "Es muy espectacular, fueron socorridas muchas personas y ahora debemos prevenir fenómenos de saqueos", añadió el alcalde, que albergó con urgencia a 120 personas en un local municipal durante la noche.

En Niza, varios árboles se desplomaron en el paseo de los Ingleses y se llevó a cabo una evacuación en un barrio del noreste de la ciudad.

Unos 35.000 hogares seguían privados de corriente eléctrica, 14.000 de ellos en Cannes.

La red de carreteras secundarias seguía impracticable en numerosos puntos avanzada la madrugada. Parte de la autopista A8 quedó sumergida por el río de la Brague.

En esta región, aún en plena temporada alta turística, más de 500 pasajeros -numerosos británicos y daneses- se encontraron bloqueados y fueron atendidos en las terminales del aeropuerto de Niza.

Cientos de 'náufragos del ferrocarril' permanecían en una decena de trenes inmovilizados en estaciones del sureste. La compañía ferroviaria SNCF les repartió comida y mantas para ayudarles a pasar una noche que prometía ser larga: ciertas vías, sobre todo alrededor de Cannes, seguían sumergidas y bloqueaban totalmente la circulación ferroviaria. Los pasajeros de dos trenes tuvieron que ser evacuados por los socorrista, sobre todo un grupo de peregrinos mayores en un tren detenido en Cannes-La Bocca.

El partido de fútbol Niza-Nantes de primera división tuvo que ser suspendido por el estado del terreno y los espectadores de un concierto del popular cantante Johnny Hallyday tuvieron muchas dificultades para abandonar el lugar y algunos se quedaron a dormir allí.

El diluvio paró en medio de la noche y las tormentas se dispersaron en dirección a la vecina Italia.

Los registros de Météo France son impresionantes. Entre las 19H00 y 22H00, se recogieron en los Alpes Marítimos 180 milímetros en Cannes, 159 mm en Mandelieu-la-Napoule y 100mm en Valbonne.

El ayuntamiento de Niza calculó que la Costa Azul ha recibido tanta lluvia en dos días como en todo un mes de octubre medio, es decir, un 10% de las precipitaciones anuales.