Desde Tecpatán (México) (AFP)

Una iglesia del siglo XVI sumergida en México reaparece por la sequía

Una iglesia del siglo XVI, sumergida por una presa al sureste de México desde hace 49 años, reapareció después de una fuerte sequía y se ha convertido en un atractivo turístico para visitar en lancha.

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Vista aérea del templo de Santiago, construido en el siglo XVI por monjes dominicos, que ha emergido de las aguas tras una sequía, en la localidad de Quechula, México, el 21 de octubre de 2015 - AFP/AFP
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Una iglesia del siglo XVI, sumergida por una presa al sureste de México desde hace 49 años, reapareció después de una fuerte sequía y se ha convertido en un atractivo turístico para visitar en lancha.

El templo de Santiago Apóstol, erigido por frailes dominicos españoles hace cinco siglos, desapareció en 1966 cuando fue construida la primera presa hidroeléctrica sobre el caudaloso río Grijalva, en el estado de Chiapas.

Juan Álvarez Díaz, lanchero de la Sociedad cooperativa Quechula, declaró a la AFP que en 2002 fue la última vez que se había visto en su totalidad el templo del pueblo de Quechula, al cual le falta el techo.

Ese año, el pueblo "organizó una peregrinación al templo, llevando al patrón Santiago Apóstol y a la Virgen de Guadalupe", dos de los ocho santos recuperados por los indígenas zoques cuando entró en actividad la presa Malpaso, recordó Álvarez Díaz.

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Imagen frontal del templo de Santiago, emergido tras un descenso de las aguas en la presa Malpaso, en el estado de Chiapas, México, el 21 de octubre de 2015 (AFP/AFP)

Los indígenas mantienen el lugar como atractivo turístico y religioso. Álvarez Díaz indicó que ya ha llevado a muchos curiosos a visitar la iglesia en su lancha, en la que caben una decena de pasajeros.

Entre 1.000 y 2.000 zoques de Quechula fueron reubicados cuando se construyó la presa y sus casas fueron inundadas junto con la iglesia. El templo tiene una altura de, aproximadamente, 15 metros y más de 60 metros de largo.

Más de la mitad de la iglesia, que estaba en el centro del pueblo, emergió en las últimas semanas tras una sequía en la presa Nezahualcóyotl. Los pájaros se posan sobre las ruinas, en las cuales ha crecido la vegetación.

Sin embargo, esta semana subió el nivel del agua debido a que desde el pasado domingo no deja de llover en Chiapas, por la presencia de una tormenta tropical y un frente frío.



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